El placer de ser enigma
Elena Ivanovna Diakonova era una niña flacucha, de pelo muy negro, ojos muy juntos y una cabeza poblada de ideas extraordinarias que le otorgaban ese punto abis...
Elena Ivanovna Diakonova era una niña flacucha, de pelo muy negro, ojos muy juntos y una cabeza poblada de ideas extraordinarias que le otorgaban ese punto abis...